La Hermandad de Emigrantes pone fin a su quincuagésimo camino con la llegada a Huelva
La Hermandad de Emigrantes de Nuestra Señora del Rocío puso punto y final a la romería de este 2022 con su regreso a la ciudad de Huelva. Una romería doblemente especial para la filial onubense más joven, ya que al reencuentro con la Virgen del Rocío tras dos años pandémicos, los hermanos de Emigrantes celebraban sus 50 caminos hacia la aldea almonteña.
Una romería que no ha podido ser plena a causa de la rotura del paso de la patrona de Almonte, lo que impidió que se reviviera la visita de la Blanca Paloma al Simpecado de la Concha Peregrina. Situación esta que se reflejaba en la cara de todos los romeros, en especial la de su hermano mayor, Nono Ortiz, que tras casi tres años con la vara dorada, dará el relevo a la nueva hermana mayor en las próximas semanas. Pese a todo, con sonrisas en la cara por lo vivido y entonando las últimas sevillanas, los peregrinos que acompañaban al Simpecado y que llenaban los carros de la hermandad regresaban a Huelva pensando ya en la Romería del Rocío de 2023.
La Hermandad de Emigrantes entraba en primer lugar a la ciudad y lo hacía por la Avenida Guatemala, lugar donde la comitiva tomaría en sus manos las insignias para realizar su paseo de regreso por la ciudad. Engalanada con un exorno de flores silvestres y al ritmo de la escuela de tamborileros de la hermandad, la carreta del Simpecado avanzaba hasta el Ayuntamiento, donde fue recibida por la corporación municipal. Desde aquí continuó su caminar hasta su casa hermandad, a donde regresó con las últimas luces del día.
