María Santísima de la Amargura ya se encuentra en la casa de la Esperanza
Nueva jornada de traslado en la Hermandad del Nazareno. Tras pasar un día junto a sus camaristas honorarias, María Santísima de la Amargura abandonó la capilla del Convento de las Hermanas de la Cruz para regresar al templo que durante tantas Madrugás fue su casa, la casa de la Esperanza.
Pasaban las ocho de la tarde cuando la Madre del Nazareno dejaba el convento, tras celebrarse una eucaristía en el interior de la capilla. Los escasos metros que separan ambos templos se recorrieron de manera fluida, con un cortejo en el que tan sólo miembros de la Hermandad del Nazareno con varas junto a D. Diego Capado y D. Jesús Azcárate. Las andas que portaban a la Virgen de la Amargura, que lucía igual que lo hizo en la jornada previa, fueron portadas en esta ocasión por la junta de gobierno de la Hermandad de la Esperanza.
Bajo el sonido de las campanas anunciando la llegada de la Virgen de la Amargura, la dolorosa hizo su entrada en la Iglesia de Santa María de la Esperanza, quedándose frente a la titular del templo. Tras las sentidas palabras de bienvenida por parte de José Manuel Mora, hermano mayor de la Esperanza, y el agradecimiento por la acogida por parte de Marcos de la Corte, hermano mayor del Nazareno, la Virgen de la Amargura fue dispuesta junto al retablo del Cristo de la Expiración y la Virgen del Mayor Dolor.