📸 Galería | Besamanos a María Santísima de la Victoria Coronada

Una de las citas más multitudinarias del 8 de diciembre onubense tiene lugar en la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús. María Santísima de la Victoria baja de su altar, por la festividad de la Inmaculada, para acercarse a todos sus devotos en un año tan señalado durante el que tanto tiempo ha estado lejos de ellos a causa de la restauración.

La Virgen de la Victoria se presentaba ante sus fieles a los pies del presbiterio del templo, escoltada por cuatro grandes blandones de madera dorada. Entre ellos se situaban sendos bouquets sobre jarras con un exorno de flores blancas. Tras la Virgen, en el altar mayor, se situaba el montaje del triduo que la próxima semana presidirá la dolorosa.

María Santísima de la Victoria Coronada vestía durante su besamanos la saya bordada en oro sobre tisú por Esperanza Elena Caro y su manto de salida, bordado en oro sobre terciopelo azul por el taller del Convento de Santa Isabel. Sobre sus sienes portaba la corona de la coronación que cincelara Manuel Varela de cara a aquel soñado día del 5 de mayo de 2012