📸 Galería | Triduo a Nuestra Madre de la Consolación y Correa en sus Dolores
La Hermandad de la Buena Muerte ha sido la primera cofradía de penitencia de nuestra ciudad en inaugurar el curso cofrade en este mes de septiembre con la celebración de los cultos a su dolorosa. Un triduo celebrado con motivo de la festividad de la Virgen de la Consolación, patrona de la Orden de San Agustín.
El altar mayor de la iglesia conventual de Santa María de Gracia acogía el aparato de cultos dispuesto en honor a la dolorosa. La Virgen de la Consolación quedaba enmarcada por un dosel burdeos rematado por el escudo de la cofradía tallado y dorado. A sus pies se disponía el Sagrario escoltado por dos de los característicos ángeles del paso de misterio de la cofradía. Varias piezas de candelería con cera blanca daban luz al altar. A cada lado del mismo se disponían las imágenes de San Agustín y Santa Mónica. El altar se completaba con un exorno floral a base de rosas y claveles rosas dispuesto sobre cuatro jarras
Nuestra Madre de la Consolación y Correa en sus Dolores vestía la saya azul bordada en plata por las Hijas de la Caridad en los años 40 ceñida por una correa agustiniana, manto de terciopelo a juego del mismo color y ráfaga cincelada por Joaquín Ossorio en 2007.