La Hermandad del Santo Entierro vuelve a denunciar actos vandálicos contra la Ermita de la Soledad
Nuevo atentado contra un edificio religioso de nuestra ciudad y contra las creencias religiosas de gran parte de la población onubense. En este caso, y como en tantas otras ocasiones, ha sido la Ermita de la Soledad la que ha sufrido la cobarde agresión de estos elementos de la sociedad que tenemos que sufrir los demás ciudadanos.
La Hermandad del Santo Entierro ha denunciado en sus perfiles sociales estos actos vandálicos que constantemente sufre la que es su sede canónica. Tal y como expone la cofradía, tan solo quince días después de hacer frente a las pintadas de toda índole que afeaban este edificio religioso cuyos orígenes se pueden datar en el siglo XV y que se encuentra enclavado en el corazón histórico de la ciudad, «nos volvemos a encontrar con otras nuevas pintadas y nuevos orines». Unas pintadas que atacan y atentan directamente contra los sentimientos religiosos de los Cristianos.
En su denuncia, la hermandad del Viernes Santo asegura que no es un problema nuevo ni puntual «ya son demasiadas veces, no solo pintadas y orines, sino también defecaciones de personas y animales». Además pone el foco del problema no sólo en la falta de seguridad y limpieza municipal, sino en el civismo social.
