La Virgen de Consolación regresa a las Agustinas tras su restauración
Los muros de la iglesia conventual de Santa María de Gracia ya acogen en su interior a Nuestra Madre de Consolación y Correa en sus Dolores. La titular de la Hermandad de la Buena Muerte era repuesta al culto en el día de ayer, una vez finalizado los trabajos de restauración a los que ha sido sometida en las últimas semanas.
Con unos días de retraso sobre la fecha prevista para su vuelta, a causa del temporal y la agenda propia del taller del restaurador, la Virgen de Consolación vuelve a lucir en todo su esplendor a los pies del Cristo de la Buena Muerte. Los trabajos realizados por el restaurador Enrique Gutiérrez Carrasquilla, quien ya restaurara la imagen en el año 2012, se han centrado en el mantenimiento de la mascarilla para corregir los pequeños desperfectos detectados, así como en la sustitución de las articulaciones de los brazos y en hacer un repaso general del estado de conservación de la imagen. La cofradía del Jueves Santo celebró en la tarde de ayer una eucaristía de acción de gracias por la llegada de su titular.