Culminan los trabajos de restauración de la Virgen de la Caridad
Nuestra Señora de la Caridad ya está de vuelta con todos sus devotos. La Parroquia de Santa María Madre de la Iglesia del barrio de Viaplana amaneció en la jornada de ayer, Solemnidad de la Purísima Concepción, con la Virgen de la Caridad repuesta al culto. Un regreso que se produce tras la culminación de los trabajos de restauración realizados por Laura Pérez Meléndez.
La imagen era retirada del culto a finales del pasado mes de agosto. Desde entonces, se encontraba en el taller de la restauradora Laura Pérez Meléndez quien, junto con la colaboración del asesor artístico de la cofradía José María Leal Bernáldez, ha realizado las labores de conservación y mantenimiento. Los trabajos han consistido en limpieza y consolidación estructural de la imagen, regresando la dolorosa tal y como llegó a esta parroquia onubense tras la restauración que su propio autor le realizó en 1995.
Para su vuelta al culto, la Hermandad de la Fe celebró una veneración extraordinaria durante toda la jornada y una Misa de Acción de Gracias. La sagrada imagen se situaba en un lateral del altar mayor del templo, bajo un dosel compuesto por dos varales de su paso de palio y una de las antiguas bambalinas de la Virgen del Valle e iluminada por los candelabros de entrevaral y varias piezas de candelería. Dos grandes bouquets cónicos con un variado y colorido exorno floral completaban el montaje de esta veneración.
Nuestra Señora de la Caridad vestía su saya de terciopelo azul bordada en oro junto a un manto de camarín burdeos cedido por la Hermandad de las Tres Caídas. Sobre sus sienes portaba su corona de salida, cincelada por Ramón León Peñuela a inicios de los noventa.